Aunque esta última entidad descarta hablar de robos de agua
o de extracciones ilegales, hay regantes de Sagunto que los dan por seguros y
creen que la Confederación “podrá detectar y sancionar si realmente se lo toma
en serio”.
De momento, responsables del organismo de la cuenca han
asegurado al presidente de la Séquia Major, Ximo Pons, que “ya han dado instrucciones
para que los guardas revisen las concesiones en la zona que va desde el pantano
a Sot”, según relató el propio Pons. “El director general, Pedro Marcos,
también se ha mostrado abierto a estudiar la regulación del río en ese tramo y
proponer alguna solución. Además, la presidenta de la Confederación ha
confirmado su intención por resolver una problemática de la que está plenamente
informada. El responsable de la Séquia, apuntó que ha visto buena
predisposición.
Los regantes de Morvedre calculan que estas pérdidas oscilan
entre el 30 y el 50% del caudal desembalsado, dependiendo no solo de los días,
sino también de las horas en la que se lleve el cómputo. “Es evidente que esto
no es por filtraciones al acuífero o a otro sitio, que siempre serían las mismas.
Son otras las razones que la CHJ va a investigar”, señaló el presidente de la
Séquia.
Este problema se arrastra desde años en la cuenca baja del
Palancia. Sin embargo, las enormes dificultades que atraviesa la citricultura
han provocado que los regantes de El Camp de Morvedre se hayan hartado de
perder agua en plena sequía y hayan exigido medidas a la CHJ, ahora que los
precios de la electricidad encarecen tanto la extracción en los pozos.
Tal y como están las cosas de mal, tienen que rebajar los gastos
al máximo, usando los pozos lo mínimo e intentado que llegue toda el agua del
Regajo que pagan, no como ahora, que a veces sueltan 35.000 litros por
segundo y les llegan entre 15.000 y 24.000 según el momento, afirmó Pons.
Actualmente, la Séquia Major de Sagunto paga el 75% del
caudal de agua del pantano del Regajo mientras que el Sindicato de Riegos de
Segorbe corre con el 25% restante de los gastos.
El objetivo pasaría, según Sagunto, por que los municipios
desde el embalse hasta Sot no acaben “regando gratis” sus cultivos. Un hecho
que, aunque desde la entidad saguntina no apuntan con el dedo, pone en el punto
de mira los usos agrícolas que se hace del agua de Navajas, Soneja, Geldo o en
el mismo Sot de Ferrer.
Investigación que surge por la petición de los regantes de
la Séquia Major de Sagunto que, desde hace años, reclaman la regulación de los
caudales del río Palancia “para que, al menos, el 75% llegue a los pueblos que
pagan el agua” y este porcentaje no se quede sólo en 50%, como ocurre en
Morvedre.
De este modo, los afectados pretenden que haya un control
sobre el consumo de las localidades de Castelló que ahora mismo no pagan gastos
como el mantenimiento del pantano del Regajo y, sin embargo, sí cogen agua del
río para regar sus campos, como es el caso de todas las localidades situadas
entre Sot de Ferrer y Navajas, lo que incluye también a Soneja y Geldo.
El presidente de la Séquia Major de Sagunto, Ximo Pons,
reclamó también el encauzamiento del agua del pantano hasta Sot de Ferrer para
que allí enlace con el canal de la Séquia Major y garantizar así que el agua no
se pierda. En este sentido, apuntó que “los cuatro pueblos que no pagan el
pantano podrían recoger el agua del río o, si es necesario, les dejarían una
cantidad.