La puja convocada por el consistorio de los bienes
embargados quedó desierta El ayuntamiento negocia nuevas tácticas para atraer
interesados
ANA MONLEÓN Azuébar El Ayuntamiento de Azuébar busca
interesados para volver a poner en marcha su planta embotelladora de agua
después de que ayer, la subasta promovida por el consistorio de los bienes
embargados a la sociedad "Aguas de Azuébar", quedase desierta.
Tras la realización de dos convocatorias y al no
haberse presentado ningún pujador, el ayuntamiento será ahora el encargado de
quedarse con todo el lote de la subasta para, en parte, paliar la deuda de
"284.885,25 ?, más otros 30.000 ? que por el momento se calculan",
que la empresa embargada ha adquirido con la
hacienda municipal tras la privatización de la planta envasadora en 2010. Para ello, el consistorio promovió una subasta de toda la maquinaria y bienes embargados por un valor inicial de 273.800 ? que, en la segunda convocatoria, quedó reducido a poco más de 205.000 ? al rebajarse un 25 %.
hacienda municipal tras la privatización de la planta envasadora en 2010. Para ello, el consistorio promovió una subasta de toda la maquinaria y bienes embargados por un valor inicial de 273.800 ? que, en la segunda convocatoria, quedó reducido a poco más de 205.000 ? al rebajarse un 25 %.
Aún así, la medida no resultó convincente y ningún
interesado acudió ayer al salón de plenos del ayuntamiento a pujar por la
compra del único lote, que contenía desde material administrativo pasando por
maquinaria generalizada, hasta maquinaria específica para el embotellado de
agua. Ahora, el objetivo pasa por que el ayuntamiento se quede todo el lote
para paliar parte de la deuda e intente negociar nuevas estrategias para poner
en marcha esta embotelladora que cerró sus puertas hace más de un año con una
deuda de más de 300.000 euros por el canon por la explotación del agua y por el
alquiler de las instalaciones. "Al ver que no ha habido ningún interesado
en la maquinaria, ahora lo que haremos es intentar alquilarlo todo, tanto la
maquinaria como las instalaciones y la explotación, para ver si, de esta
manera, conseguimos que alguien se interese", explicó a Levante de
Castelló el alcalde de la localidad Gerardo Miravete.
En este sentido, el munícipe popular comentó que
nada más dar a conocer a principios de mes la noticia de la subasta, "sí
hubo varias personas interesadas en el tema que incluso se desplazaron hasta
Azuébar para visitar las instalaciones y conocer de primera mano la
situación". Sin embargo, continuó Miravete, "parece ser que lo más
atractivo de cara a los interesados pasaría porque nos lo quedásemos desde el
ayuntamiento para no tener que realizar ellos la inversión de la maquinaria
también, por lo que ahora deberemos estudiar las condiciones y, más adelante,
intentar sacar a concurso la explotación de nuevo", matizó.
Explotar el manantial
Para el munícipe azuebero, "lo mejor sería que,
en estos tiempos de crisis, una empresa más grande que ya esté dedicada a la
explotación de agua y le falten recursos, quisiera acceder a explotar el
manantial de la Fuente de Sas, aunque si hay alguien interesado en empezar de
nuevo también estaría bien".
Sin embargo, tras un plazo de alrededor de dos años
de privatización, finalmente, Aguas de Azuébar cerró sus puertas el pasado año
adquiriendo una deuda de más de 300.000 euros al no haber hecho frente, ni a
los pagos de alquiler de las instalaciones municipales, ni al canon que se
estableció en su día por la extracción del agua del manantial de la Fuente del
Sas.
Ante esta situación, desde el ayuntamiento se
procedió a realizar los trámites necesarios para cobrar la deuda embargando
todos los bienes con los que cuenta la empresa que ayer salieron a subasta por
273.800 euros.